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FORO DE CRÓNICAS DE LA GUINEA ECUATORIAL _ RELATOS DE VIAJEROS _ CRONICAS DE LA ASCENSION AL PICO

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Jul 17 2004, 05:27 PM

CRÓNICAS DE LA ASCENSION AL PICO

1ª Como empezó

Procuraré contaros lo más brevemente posible lo que supusieron los trabajos de la expedición que tuvo por objeto levantar el trazado de la entonces futura carretera al Pico de Sta. Isabel.

Omitiré los datos de los que no tenga absoluta seguridad ya que han pasado 38 años y aunque entonces los tenia frescos, el tiempo no pasa en vano y mi archivo básico de consulta que es mi madre, también flaquea de memoria.
No obstante la idea es lo que cuenta y trataré de comunicarosla bién.

Por lo que mi padre me contó, el Pico se coronó algunas veces antes, aunque no muchas.

Que a mi me conste, en el siglo IX en primera ocasión por algún Inglés.

En los años 30 o 40, creo que un cura de Sta. Isabel lo logró, por puro placer y en la década de los 50 creo que lo hizo también una expedición de naturalistas alemanes que por cierto descubrieron una cantidad ingente de especies de insectos, pájaros y plantas que hasta entonces no estaban catalogadas, a nivel mundial.

A modo de introducción os diré que el Pico tiene una altura, comprobada entonces, de 3.008m., siendo una de las montañas más altas de Africa, después del Kilimanjaro ,Ruvenzori, Mte. Camerún y algunas del Atlas.

Como os podéis imaginar estaba prácticamente virgen y su vegetación lógicamente es cambiante, desde los limites de las últimas fincas explotadas (300-400m. de altura) en los que el bosque es como todos lo recordamos, caluroso húmedo y tropical, pasando por un tipo de bosque como podría ser el de Moka, templado y fresco de noche y terminando en un tipo de bosque muy especial, prácticamente en la cima, a los pies del gran cráter de remate.
Digo especial porque en contra de lo que pudiera parecer, cerca de la cima, el bosque es de árboles de menor porte, pero en cambio el sotobosque, el bicoro, la maleza a nivel de suelo es endiabladamente espesa e intrincada, siendo dificilísimo avanzar a una velocidad digna de tener en cuenta, con el agravante de que es muy frecuente estar dentro de bancos de nubes y que por la noche, las temperaturas pueden bajar hasta los 12-15 grados sin más, si a esto le añadimos la posibilidad de viento, el panorama no puede ser más distinto, al resto de nuestra Guinea más conocida.

Os diré que mi padre contaba, que cuando Alfredo Sauras llegó a Fernando Poo para incorporarse a la expedición, desde Rio Muni que era su lugar habitual de trabajo, mi padre le explicó las dificultades que les aguardaban, por la espesura del bosque y demás circunstancias
dificiles, Sauras bromeó diciendo que el “ya estaba acostumbrado a esas cosas”.

Cuando finalmente la aventura teminó, le reconoció expresamente que no había conocido un bosque tan dificil nunca antes en su vida.

La diferencia de la expedición que nos ocupa, con las anteriores, era que en esta ocasión no se trataba de explorar sin más, sino que se trataba de tomar mediciones exactas, datos y levantar planos precisos de una futura carretera, con una serie de condicionantes, técnicos económicos, etc.. es decir hacer un Proyecto técnico en toda regla, para subir a 3008m. de altura en una montaña de la que no se tenía absolutamente ningún plano topográfico ni geográfico digno de mención, habia que hacerlo “todo”.

La expedición la componían:

- Ramón Izquierdo, (Ingeniero) .
- Jose Mª López Padilla, (Ingeniero técnico).
- Alfredo Sauras, (Capataz).

- Dos cabos de la Guardia Colonial

- Doce hombres más, en calidad de porteadores y ayuda.

Merece la pena detenerme a explicaros para el que no conociera a Ramón Izquierdo, que para mi era uno de los “adultos”, con los que yo me quedaba absorto escuchándole y observándole, era el tipo de hombre “sabio distraído”, descuidado en el vestir, conversador y sobre todo con un gran corazón, era imposible aburrirse con él.

Alfredo Sauras como ya os he adelantado, era un hombre experto en abrir carreteras en el continente y la anécdota que define su profesionalidad y modo de vida es que en una ocasión, (¡ donde no estaría de remoto el lugar donde se encontraba en Rio Muni ¡), fué mordido por una serpiente “Ceraster” y únicamente pudo salvar la vida porque los nativos (sabios por otra parte) de la zona, le aplicaron un emplaste de hierbas después de abrirle la herida con un machete y después de pasar dos o tres días en coma y con fiebre,(esta serpiente es conocida como la “cuatro pasos”, porque esos son los más que puedes dar, después de ser mordido, antes de caer muerto al suelo, preguntarle a Isabel Diaz Abaunza).

Del resto de la expedición lo que sé, es que se portaron con extrema lealtad he hicieron un trabajo excelente.

De los dos cabos de la Guardia Territorial, podria presuponerse y casi no haria falta decirlo.

Pero lo extraordinario es, que los otros doce hombres fueron voluntarios que estaban presos en la cárcel, algunos (no se la proporción), por delitos de sangre y se sumaron a la aventura a cambio de reducción de penas en algunos casos o de la anulación en otros.

Mi padre no se cansaba de contarnos después lo “buena gente” que fueron.

De mi padre, cualquier cosa que os contara seria......subjetiva, por tanto prefiero que preguntéis si queréis, a otros que le conocieran.

Después de esta introducción os puedo empezar a relatar, que las primeras salidas se efectuaron en Octubre de 1965.
De momento todo era normal y se volvía a Sta. Isabel en el mismo día.
Según se iba avanzando en la definición de la trocha inicial y está era más larga, fue necesario empezar a establecer campamentos y pernoctar en ellos, limitando las bajadas a la ciudad a una vez, cada dos o tres días.

La idea era ir dejando unos campamentos-base, cada cierta distancia para establecer una especie de “cadena” de conexión e ir cuidando de que la trocha no se invadiera de vegetación otra vez.
Esta situación idílica, se pudo mantener, hasta la cota 1200-1300m. es decir hasta la altura aproximada de Moka, momento en que ya solo se bajaba a la ciudad, como mucho una vez a la semana.
Cada vez era más trabajoso regresar a Sta. Isabel, además de ser una gran caminata y pérdida de tiempo, las bajadas se fueron espaciando y la última me comenta mi madre que fué en las Navidades del 65 que actuaron como fecha tope.

A partir de ese momento comenzaba la .....................................................................VERDADERA AVENTURA
que les llevaria hasta los 3.008 m. y a otras experiencias

Jose Eduardo padilla

17-Julio-2.004

Publicado por: malé chillida el Jul 17 2004, 09:02 PM

Jose ... gracias .. me lo he leido del tirón .. y ya estoy deseando la segunda y restantes partes que vendrán.

Imagino que la opinión que quieres de Josemaria, no es la que yo pueda dar, ya que además de subjetiva ( .. el único hombre y/o adulto que pensó que nosotras - las niñas de Moka - tb teniamos derecho, ganas y fuerzas para hacer excursiones .. de él aprendí que cuando caminas y tienes sed, mejor que beber es mordisquear un palito, eso hace que salibes constantemente y la sensación de sed se atenua .. nunca lo olvidé smile.gif .... ), mi relación con él siempre fue "descompensada" ... es decir .. una niña frente a un padre wink.gif ... no obstante, Padilla siempre me pareció un hombre amable, simpático, legal y con un alto concepto del respeto. .. valor para mi imprescindible ... ya que cuando se tiene integrado de verdad - como él - emana de forma natural hacia todo lo que le rodea, en ese todo que le rodeaba estaba yo .... y de esa forma él estaba en mi vida .... nunca le necesité de forma especifica .. spre conté con él ... por si acaso smile.gif

Os quiero mucho querido .. mil besos y sigue ... ójala nos lo hubieras podido contar entonces ..... nunca es tarde wink.gif

Publicado por: mariasun chillida el Jul 17 2004, 11:24 PM

Querido Jose:
Estoy en ascuas, esto tuyo es como una novela de aventuras, por entregas.

Que pena que cuando estabamos juntos allí y nos veiamos con tanta frecuencia, siempre pensé de ti que eras aburrido y que no tenias nada interesante que contar, que equivocada estaba!!!!!, pero so "capullo" dry.gif
porque no nos contabas estas cosas tan interesantes cuando nos veiamos cada día?. Lo dicho, una pena, un desencuentro lamentable, seguramente fruto de nuestra inmadurez, pero como bien está lo que bien acaba, al final nos recueperamos l@s un@s a l@s otr@s y aqui estamos compartiendo todo lo que teniamos que compartir y mucho más, yo igual que Malé, tambien te quiero mucho, pero creo que eso ya lo sabes. :ph34r:

No creo que mi opinión sobre tu padre, tampoco sea muy imparcial pues yo le queria muchisimo y le admiraba tanto como le queria, siempre me ha fascinado su sentido del humor y el convencimiento y coherencia con las que hacia las cosas. Cuando queria hacer algo, ese algo le "poseia" y le dedicaba todas sus energias y pensamientos, para mi siempre fué un ejemplo de constancia y determinación, y a él le tengo que agradecer las cosas que conocí de Moka, pues él se brindó o tengo que decir se empeño en enseñarnos algunos de los lugares que el habia visitado. smile.gif

Por favor, si es posible, que la novela sea de capitulo diario mejor que semanal tongue.gif

Te leeré con asiduidad, Un beso :ph34r:

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Jul 17 2004, 11:42 PM

A mis amigas Male y Mariasun:

Que más quisiera yo que escribir estas cosas más a menudo, pero ya os contaré en que circunstancias de trabajo profesional lo estoy haciendo.

Lo que ocurre es que a pesar del estrés del trabajo de este més pre-vacaciones, llega un momento en que me relaja el hacerlo, me despeja la mente y me carga las pilas.

En cuanto al porqué no era más comunicativo en "aquellos momentos", todo tiene "mi" explicación y espero poder hacerme entender en algúna que otra "entrega", siento la necesidad de hacerlo y lo haré, otra cosa es "cuando ?".

En cualquier caso,muchos besos y también para la "jefa" :ph34r: :ph34r: :ph34r:

Publicado por: Paco el Moro el Jul 18 2004, 09:08 AM

El primer europeo en subir al Pico de Santa Isabel parece ser que fué el Capitán Owen,fundador de la Colonia Británica en F Poo y creador de la ciudad de Clarence, luego Santa Isabel, allá por el año 1829-1830 (Historia Gegráfica de la Isla de F. Poo, pag 132).luego ,tambien hay sus dudas lo haría Mr Beecroft en 1840 0 1843, que sería gobernador de la colonia con los ingleses y también con los españoles, en ambas expediciones, al parecer murieron de frío varios nativos que les acompañaban.
En cuanto a los nativos, siempre pensaron que en la brumas del pico estaban los espiritus de los antepasados, así que no eran muy amigos de subir por allí.

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Jul 23 2004, 03:47 PM

CRÓNICAS DE LA ASCENSION AL PICO
2ª Etapa decisiva

Inmediatamente después de las Navidades de 1965 comenzaron los preparativos para la segunda mitad de la aventura de subida al pico, las Navidades sirvieron de “reposo del guerrero”, antes de la gran batalla, pero pasaron rápidamente y el tiempo no perdonaba.

No se sabia el tiempo que seria necesario para llegar arriba con el trazado calculado y dibujado, de una carretera “posible”, pero no podían permitir que llegaran las lluvias siguientes porque gran parte del trabajo se perdería, habría que abandonar y perder prácticamente un año, por tanto había que planearlo muy bien y adelantarse a cada problema previsible

Poco a poco se había ido estudiando la forma de conseguirlo, porque no existían precedentes de una obra de esa envergadura en Guinea, con los condicionantes que esta tenía y los medios materiales de que se disponía en esa época.

Para empezar y hasta entonces, la trocha inicial se había abierto con dificultades pero su mantenimiento era posible dejando cada cierta distancia campamentos base y un par de hombres de guardia, encargados de mantenerla transitable, limpia de bicoro y maleza, en última instancia y en caso de urgencia, Sta. Isabel estaba a dos o tres días de marcha.

El bosque hasta esa cota de 1200-1300m. era denso pero más transitable que a partir de ese momento.
Era bosque caluroso, con árboles de más porte, pero con menos sotobosque, mas umbrío a nivel de suelo y más fácil de mantener, una vez transitado.

El problema más importante a solucionar era la forma de conseguir agua de forma regular, a ser posible comida “de vez en cuando” y los medicamentos que en un momento dado fueran necesarios.
Hasta esa altura, se encontraron ríos y manantiales, pero las laderas del pico son muy inclinadas y a partir de esa cota no existirían corrientes estables de agua, como mucho manantiales o lagunas aisladas y su localización seria pura casualidad mientras que la necesidad de dar de beber a la expedición era algo que no se podía improvisar.
En el peor de los casos llevaban como precaución pastillas potabilizadoras de agua, en previsión de encontrar charcas o lagunas en el estado que fuera de salubridad, pero no era suficiente.

El tema de la alimentación se paliaba en parte por la caza y por tanto no era tan acuciante como el agua y las medicinas, aunque ¡ había que cazar ¡ ...............................................y no por hobby.

A titulo de anécdota os contaré, que el único cocinero que hasta entonces acompañaba a la expedición, era un nigeriano que había trabajado en mi casa y era muy bueno profesional y personalmente, mi padre le preguntó al principio si quería ir, porque hacia falta un cocinero y él dijo que si.
Al tercer día de comenzar la segunda etapa, no le encontraron en el campamento al amanecer, el inocente de él, a los dos o tres días de desaparecer se presentó en mi casa en Sta. Isabel hecho un desastre y al borde de la inanición .
Cuando pudo recuperarse y hablar, le dijo a mi madre que no podía soportarlo más, que “alli arriba”¡ si que habia morimó ¡ , “sobre todo por las noches”...........y decidió volver “y solo”, antes que seguir subiendo, porque cuanto más arriba, “mas morimó” (genial.............................).

Así que la expedición se vio sin cocinero hasta el final.

Por lo demás, en el aspecto humano, ya os dije que además de los dos cabos de la Guardia Colonial, iban doce braceros, presos por delitos de sangre en su mayor parte, delitos tales como cortarle el cuello a machetazo limpio a un tipo por cuestión de infidelidades o a una de sus mujeres por la misma razón.

Os puedo contar que esta gente durante el día iban armados como mínimo con machetes, para mantener la trocha y abrir paso para transportar los aparatos de medición. y en muchos casos con escopetas para poder cazar y montar guardias cuando tenían que quedarse en puestos solos algún tiempo.
La única precaución que se tomaba, era recoger las armas durante la noche, por un mínimo de previsión .
Bueno pues ya os conté que mi padre no se cansaba de repetir, lo maravillosamente bien que se portaron, no hubo ni el más mínimo incidente, muy buena gente..

Volviendo así al tema del problema del agua y medicinas fundamentalmente, se ideó por tanto el sistema de intentar aprovisionar a la expedición de forma periódica desde el aire, usando los T-6 del ejército.
No se de quién partiría la idea ni como se pactó, mi madre no lo sabe o no se acuerda, supongo que seria de forma oficial.
De todas formas, siendo una buena idea o seguramente ”la única posible”, no estaba garantizada su eficacia porque no hace falta que os recuerde que se estaba atravesando un bosque prácticamente virgen, endiabladamente espeso, enmarañado a todos los niveles y a partir de esa cota, aún mas espeso y lento de transitar.

Quedaba por ver si una vez que el T-6 alcanzase la altura de la expedición y por radio se confirmase “aproximadamente”la posición de esta, era posible soltar los fardos con el grado de precisión suficiente como para que los de tierra pudiesen “encontrarlo”.

(Sabréis que el T-6 era un avión “caza”, de guerra, con mucha potencia de motor y poca capacidad de planeo es decir, sin motor cae como un peso muerto e incapaz e planear y en cambio con motor es muy veloz y potente, pero esa velocidad era un inconveniente para conseguir precisión en la suelta de bultos).

Para el que no haya circulado nunca por el bosque de Guinea, esto le puede sonar a divagaciones mentales, pero supongo que muchos de vosotros, si lo habéis experimentado y me comprenderéis cuando os digo que yo he abatido a veces una simple paloma en Moka y he estado absolutamente seguro del lugar exacto de su caída a no mas de 6 o 7m. y “me ha sido imposible encontrarla” unas veces y “casi imposible llegar al lugar” otras, o las dos cosas simultáneamente.

Cuando en el año 68 yo subí por primera y última vez a pico en el verano y vi que clase de bosque había hasta las faldas prácticamente del gran cráter, comprendí el problema.

Por lo que mi padre nos contó, en las primeras ocasiones en que se puso en marcha el sistema, los envíos se perdieron hasta el punto que llegaron a desesperarse, el avión no podía hacerlo mejor, ni los de tierra tampoco.
En ocasiones, sin más, no eran capaces de encontrar los bultos a pesar de que la pericia del piloto era impecable, pero la desesperación empezaba porque incluso el contacto visual era a veces “imposible”por la espesura del bosque y la ausencia de “altos” despejados, en el mejor de los casos se producía un contacto por radio y se complementaba con el ancestral sistema de las “señales de humo”.
Cuantas veces por lo visto, tuvieron que renunciar al agua y el envió que fuera, después de “horas de búsqueda” porque en ese bosque 50 o 100m. de distancia son la diferencia entre el “si” o el “no”.

En otras ocasiones, después de que todo lo anterior se solventase y por fin consiguiesen llegar a los fardos, los recipientes se habían roto por el impacto. ¡ Vuelta a empezar ¡ , a beber agua de charcos con poto-poto!

Y todo esto “mientras se realizaba el trabajo propiamente dicho” de mediciones, levantamiento de planos, comprobación de posiciones, apertura de trochas a golpe de machete etc...

No quiero dejar pasar ni un minuto más para deciros a todos, que el piloto habitual que corría con la responsabilidad de esta misión era el capitán Miguel Delgado Rosique.
Como comprenderéis, yo entonces era un crío y el mundo de los adultos me pillaba un poco lejano, pero me he venido a enterar a través de nuestra página web, que este hombre era primo de Paco Carey, no tenia ni idea.
Lo que si os digo es que en mi casa, a lo largo de todos estos años que han pasado, ¡ cuantas veces se habrá pronunciado ese nombre! y ¡ con cuanto agradecimiento y cariño ¡, vaya por delante este “primer” homenaje porque gracias a él se pudo terminar el trabajo, de otro modo hubieran tenido que abandonar.

Volviendo a donde lo dejamos, la verdad es que siempre era Rosique el piloto que subía, no tengo información de si era por amistad, por su propio gusto (no me extrañaría porque para un profesional, yo hubiera estado encantado de encargarme de eso) o por órdenes del mando, el caso es que era así.

Se estableció así una compenetración importante entre tierra y aire, ideándose una solución para el tema del suministro de agua que consistía en llenar una cámara de rueda de coche al 70%.
Así lo ensayaron y definitivamente ¡ funcionó ¡, la rueda era elástica, aguantaba bien el impacto con los árboles e incluso rebotaba sin llegar a estallar, gracias a que no estaba llena al máximo.

Era lo fundamental porque la comida aunque pudiera sufrir algún golpe era recuperable, pero sin agua no podían aguantar y os recuerdo que aunque parte del equipo quedaba en campamentos algo más abajo, como mínimo se movían 10 o 12 personas.

Por fin tenían resuelto el problema básico y elemental de subsistencia y dedicarse a su trabajo de una forma más o menos rutinaria.

Sobre esas “rutinas” y como llegaron por fin a la cima con el trabajo hecho, os contaré lo que sé otro día y como algunas cosas nos entristecerán a todos, motivo de más para descansar por mi parte porque creedme si os digo que “escribirlo es como volver a vivirlo” y a veces se disfruta y otras el alma se cabrea bastante.



23-Julio-2.004

(Besos y Abrazos)

Jose Eduardo Padilla

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Jul 23 2004, 03:59 PM

Jose Eduardo Padilla

P.D. Como complemento a esta 2ª CRONICA, trataré de adjuntar una foto de Ramón Izquierdo y mi Padre, para que os hagais una idea de lo "placentero" de "la excursión", si no lo consigo, en mi album la teneis

 

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Jul 23 2004, 05:39 PM

CRONICAS DE LA ASCENSION AL PICO
2ª Etapa decisiva

P.D. Os envio foto tomada en la cota 1.900m. del pico en Mayo de 1966, para que os hagais una idea del tipo de bosque de que os hablaba, en ella se ve a Alfredo Saura, Ramón Izquierdo , mi padre y dos braceros. :ph34r: :ph34r:

 

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Jul 23 2004, 05:42 PM

CRONICAS DE LA ASCENSION AL PICO
2ª Etapa decisiva

P.D. Otra foto de la cota 2.900m.

 

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Jul 23 2004, 05:45 PM

CRONICAS DE LA ASCENSION AL PICO
2ª Etapa decisiva

P.D. Otra foto, de la caza de la que se alimentaban y de uno de los "campamentos".
En el fondo para mi, hubiera sido guay vivirlo...............¿ o no?.
:ph34r: :ph34r:

 

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Jul 23 2004, 05:47 PM

CRONICAS DE LA ASCENSION AL PICO
2ª Etapa decisiva

Foto del equipo completo, en la cima (Marzo 1966).
Alfredo Saura, Ramón Izquiero y mi padre.Se les ve felices................................................................. ¿no?
:ph34r: :ph34r:

 

Publicado por: ISABEL DIEZ ABAUNZA el Jul 23 2004, 09:54 PM

Felicidades Jose por tus crónicas, me parecen muy interesantes, ojala hubiera podido vivirlas, continua escribiendo, cada noche me conecto esperando encontrar otro relato tuyo, un besazo muy fuerte. :ph34r:

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Jul 24 2004, 05:25 PM

PARA PACO EL MORO

Paco, si has seguido leyendo algo más, ya habrás visto cuanta razón tenias en tus comentarios.
Abrazos

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Jul 24 2004, 05:28 PM

PARA ISABEL DIEZ ABAUNZA

Isabel, muchas gracias y me alegro de que te guste.
Tengo más historias en la cabeza pero estoy muy axfisiado de trabajo. Antes o después caerán.
Besos

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Oct 5 2004, 04:37 PM

5 de Octubre de 2.004

CRÓNICAS DE LA ASCENSIÓN AL PICO
3ª Lo consiguieron


Sin duda esta crónica y la siguiente son las que más me va a costar relatar porque tienen grandes luces y grandes sombras, ambas de igual intensidad y por tanto emociones encontradas.
En cualquier caso, eso es la vida y esta aventura como casi todas tiene una amalgama de emociones contrapuestas para todos aquellos que de una forma u otra tuvieron algo que ver con ella.

Os relataré sin más, algunos aspectos y anécdotas curiosas de la “rutina diaria” en el bosque :

Una vez consolidadas las rutinas de cómo conseguir víveres y agua para poder subsistir, no quisiera dejar de contaros algunos aspectos que aunque técnicos, explican algunas de las dificultades con que se encontraron profesionalmente los integrantes de la expedición y que siempre tenían el mismo origen, los tupidos bosques del pico y la desconocida geografía de la zona.

Básicamente para dibujar la carretera en un plano más tarde en los despachos, era necesario ir situando puntos con sus coordenadas exactas, en cuadernos y tablas de campo.
Cada nuevo punto a situar, se referenciaba a un punto inmediatamente anterior cuyos datos se dan por buenos y conocidos, así sucesivamente.
Para situar un punto respecto al anterior conocido, el procedimiento es situar un aparato de medición en el punto conocido y una mira vertical graduada en el nuevo punto, de forma que mirando desde el aparato óptico, se puedan definir las coordenadas del punto nuevo.
Os comento esto para que comprendáis que en otra cualquier parte, este proceso es infinitamente más sencillo, pero en el bosque del Pico, en medio de una estrecha trocha recién abierta en el bosque virgen, la máxima distancia desde la que se podía observar una mira con los aparatos de medición era muy pequeña con l cual el número de anotaciones se multiplicaba.
Pero esto en si mismo es lo de menos, es un trabajo profesional normal.

Las complicaciones que surgieron fueron de varias clases.

En numerosas ocasiones y dado que no existían planos topográficos del Pico, “se iba a ciegas”, con lo cual de improviso se encontraban con un barranco impresionante, una cortada o cualquier otro accidente geográfico que les obligaba a volver a empezar desde ¿dónde?, pues desde donde decidiesen por intuición.
La ausencia de zonas despejadas y altas, desde las que ver el conjunto y tener una idea general de “en donde se estaba” y “hacia donde dirigirse”, era agobiante.
Tratar de imaginaros la faena, y eso todos los días .
Incluso, en la espesura del bosque no se tenia sensación clara de la hora del día que era, ya que la luz se tamiza con las copas de los árboles y se percibe blanquecina y homogénea, sea la hora que sea, incluso hay que olvidarse de intuir al amanecer y atardecer donde está el Este y el Oeste

Otra curiosa complicación que surgió en un momento dado fue la siguiente:

Detectaron de forma casual una serie de errores de cierta importancia en las mediciones y después de chequear y comprobar datos, no encontraban el motivo.
Los detalles de cómo lo consiguieron averiguar no los sé pero el caso es, que el error se producía porque los aparatos que utilizaban la brújula como elemento de medición, daban errores y desviaciones considerables.
Se pusieron por radio en contacto con Sta. Isabel y desde allí se mandaron telex a Alemania y Suiza, países de fabricación de los aparatos, facilitando números de serie y solicitando informes a cerca de posibles fallos de fabricación.
La conclusión final fue que los aparatos estaban en perfectas condiciones y que la explicación podría estar en las desviaciones producidas “por la propia geología del Pico”, (omito más aclaraciones por motivos de discreción ya que no me parece oportuno que se haga público el dato a estas alturas en un lugar abierto como internet).

Por lo demás la vida diaria transcurría con las limitaciones de siempre que ya os conté en cuanto a la necesidad de encontrar agua y víveres suficientes.
Las provisiones y el agua que Rosique soltaba, se guardaban como oro en paño y se “estiraban” al máximo, pero eran mucha personas y continuaban teniendo que potabilizar agua de lagunas o charcas y seguir cazando lo que podrían .

Recientemente mi madre me contó, que respecto al agua, en bastantes ocasiones recurrieron a beber del agua que obtenían cortando lianas, cuando me lo dijo me sonó a “exótico, novelesco”, pero haciendo un esfuerzo y retrotrayéndome a aquellos días, conseguí verlo “normal”, entonces no me hubiera sonado tan fantástico, pero los años pasan y uno acaba por cambiar y estar inmerso en la sociedad urbana y occidental en la que se vive.
Al menos me queda el consuelo de que hay “otras formas” de vivir y la satisfacción de haberlas experimentado a tope.

Otro incidente digno de mención fue el incendio que se provoco fortuitamente, estando ya prácticamente en la cima del Pico.
Las noches a esa altura eran bastante frías y lógicamente la expedición hacia fuego para calentarse y cocinar, al ponerse el sol.
Mi padre siempre fue muy extremado en cuanto a las precauciones con el fuego pero a pesar de cubrir los rescoldos con tierra y piedras, después de retirarse a las tiendas, se levanto un fuerte viento que fue capaz de reavivar los restos y extender un incendio por las praderas de hierba que cubrían las laderas del cráter de la cima.
Aquello no pasó de un pequeño susto, pero el resplandor se vio desde Sta. Isabel y mas concretamente fue observado por los que en ese momento estaban en el cine Jardín en sesión de noche.
La cosa no pasó de ahí pero a mi madre por ejemplo le causó cierta alarma hasta que pudo confirmar que no hubo mayores consecuencias.
Como podréis imaginar, también hubo comentarios de otra índole acerca del "morimó del Pico".......................................................................................................................................


Por lo demás como ya os dije, los nativos nigerianos en su mayor parte convictos que acompañaban a la expedición respondieron con una gran calidad humana.
Únicamente hubo un pequeño incidente. En los últimos días previos a la coronación de la cima, una tarde apareció por allí un nativo que se suponía, debía estar en el anterior campamento base, a una jornada de camino Pico abajo.
Su protesta era que no estaban dispuestos a quedarse solo dos personas de guardia en el campamento porque había mucho morimó.
El asunto se solucionó reorganizando el tema y dejando a tres en cada campamento.

La cima del Pico se coronó el dia 6 de Marzo de 1.966 , como testimonio se grabó y clavó a una estaca, una tablilla rústica de madera con los nombres de todos los participantes en la aventura.
En mi álbum de fotos y creo recordar que también en el de Cechu Sobrino, podéis verla.
Esto no significa que acabara ahí el trabajo, pero si que fue exactamente ese día cuando se puso el pié en lo más alto del Pico.
Por fin podían decir que “habían llegado”.



José Eduardo Padilla



Posdata:
En un principio pensé que esta seria la 3ª y última crónica de esta serie, pero me estoy extendiendo mucho y no veo motivo para eliminar nada, tampoco sé si excedería la capacidad del foro de forma que el resto que por otra parte lo merece, lo compendiaré en una última 4ª crónica que está prácticamente acabada.
Abrazos.

Publicado por: Foxtrot el Oct 5 2004, 11:39 PM

"Jodio" me has fastidiado el comentario, que pensaba añadir a lo del fuego en el Pico, que todos vimos desde el Cine Jardin. Estabamos más pendientes de la evolución del fuego que de la Pelicula ( la cual no recuerdo, ni falta que hace), pues alli arriba estaba la EMOCIÓN.

Un saludo de Fernando.

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Oct 7 2004, 09:26 PM

Pues creeme que casi me olvidé de esa anécdota, pero en el último momento la recordé gracias a que el dia antes de editar la crónica, comí en casa de mi madre y me lo recordó.
Un abrazo

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Oct 7 2004, 09:28 PM

Pues creeme que casi me olvidé de esa anécdota, pero en el último momento la recordé gracias a que el dia antes de editar la crónica, comí en casa de mi madre y me lo recordó.
Un abrazo.

(COSAS DE LA INFORMATICA-COMENTARIO POR DUPLICADO-COMO LAS POLIZAS DE LA ADMINISTRACION)
M´BOLO.

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CUCÚ !! ... tongue.gif

A ver Josedu ... cuando lanzas un post y no te gusta como te ha quedado o quieres modificarlo ..... EDITAS -----> corriges --> RELANZAS (modificar comentario). SÓLO PARA MIEMBR@S REGISTRAD@S smile.gif


DND biggrin.gif biggrin.gif biggrin.gif

PD/ Conste que esto de entrar a un post "ajeno" lo hago porque el josedu es como mi hermano y no se va a molestar y tb porqué he pensado que si se lo digo justo donde le ha pasado, le resultará más fácil entender lo que le cuento ....... y como no ... valga ya para todo el mundo. No obstante .... alguien me "regañará" .. que lo sé yo .... unsure.gif

KSS


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Publicado por: malé chillida el Oct 8 2004, 10:37 AM

UN EMOCIONADO Y AGRADECIDO HOMENAJE A ESA PEQUEÑA-GRAN MUJER .... CARMEN BALABASQUER (más conocida por el nombre del que fue su marido :mellow: ).. MEMORIA DE ESTE FORO Y MEMORIA DE NUESTRAS VIDAS ......

UNA VEZ MÁS ... SIN ELL@S NO SERIAMOS CASI NADA.

TE QUEREMOS MUCHO MISIS ESMOL wink.gif

wub.gif wub.gif wub.gif wub.gif wub.gif wub.gif wub.gif wub.gif wub.gif wub.gif

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Oct 23 2004, 12:59 PM

23 de Octubre de 2.004

CRÓNICAS DE LA ASCENSIÓN AL PICO
4ª Luces y sombras

Dejo para esta última parte, el relato de los hechos concernientes al fatal accidente de Rosique y el cabo Reina porque creo que por méritos propios se lo merece.

El accidente, no recuerdo la fecha exacta en que ocurrió.
Debió de ser con anterioridad a ese día 6 de Marzo de 1966, de culminación de la cima del Pico que os comentaba en crónicas anteriores, nadie de mi entorno recuerda la fecha exacta y como esto es un foro abierto, si alguien conoce el dato o cualquier otro, podría aportarlo para completar nuestros archivos colectivos de memoria.
En cualquier caso, parece que Febrero de ese año es a groso modo la fecha correcta.

En general he procurado no mencionar ningún dato o hecho del que no esté absolutamente seguro, por lo tanto insisto, tiremos de nuestra memoria y enriqueceremos nuestros recuerdos comunes, porque son excepcionales.

Como anécdota previa os diré que mi padre tenía un oído excepcional, nos contaba que en muchas ocasiones en las que el día estaba despejado, él “oía” perfectamente despegar al T-6 “desde el aeropuerto viejo de Sta. Isabel”, estando la expedición ya en la cima del Pico y de esa forma sabia con bastante aproximación el tiempo que tardaría en aparecer su esperada y familiar silueta recortándose en el cielo, era su contacto con la civilización, una bocanada de aire fresco y un recordatorio de que “no estaban solos”, nada más y nada menos.

Ese triste día el T-6 acababa de evolucionar y llevaba ya algún tiempo en contacto visual con el personal de la expedición, no se si ya habría soltado su envío o no, pero todo transcurría con normalidad.
Después de dar unas pasadas rutinarias, desapareció como en otras ocasiones, virando en circulo tras la falda del Pico como maniobra habitual para volver a aparecer por la ladera opuesta o para definitivamente regresar.

Lo que mi padre nos contó es que él percibió muy claramente dos cosas a los pocos instantes de desaparecer el caza de su campo de visión:

La primera una parada “súbita y repentina” del ruido del motor.

Inmediatamente después un ruido sordo inequívocamente de un impacto.

Imaginaros que en unas fracciones de segundo la situación pasó de ser agradable, rutinaria y normal, al desconcierto, el caos, la angustia y la incredulidad.

Inmediatamente de suceder esto, comenzó una actividad frenética porque todos se temían lo peor, pero por otra parte no acababan de darle crédito a la situación y reaccionar, la angustia y la incertidumbre se apoderó de la situación durante breves momentos que se les hicieron interminables.

Tener en cuenta que en el silencio del Pico, se oye con mucha claridad cualquier ruido o sonido, pero las distancias que la mente asocia son engañosas y el ruido puede proceder de mucho más lejos de lo estimado en un principio, con lo cual la incertidumbre de a donde dirigirse, se sumaba al estado general de ánimo y al desconcierto.

No tenían apenas ninguna duda “racional” de que el avión había sufrido un accidente pero no tenían idea de la gravedad del mismo ni de la dirección exacta a la que dirigirse en su busca, ya que el impacto se oyó fuera del campo de visión y a una distancia indeterminada, se pusieron en marcha de inmediato las pocas personas que en ese momento estaban allí y en la dirección aproximada que llevaba el avión en los últimos segundos que pudieron verle, ese era el único dato de la trayectoria que tenían.

La angustia era insoportable porque el tiempo estaba en su contra y la mente en momentos así no razona con claridad, suponían lo peor pero eran conscientes de que en caso de admitir una intima esperanza de encontrarlos con vida, la habilidad y la suerte de no errar en la elección del itinerario a seguir era vital para ganar la partida al tiempo, podía ser la diferencia entre la vida o la muerte de los accidentados.
Se envió un emisario al campamento base más cercano para que subieran todas las personas posibles a ayudar.

Mi padre mientras se ponían en marcha y durante todo el camino, contactó con Sta. Isabel por radio y les informó de lo ocurrido y del inicio de la búsqueda, pidiendo también que se organizara una expedición urgente de rescate.

El aeropuerto confirmó que el caza no había regresado (siempre quedaba un resquicio inconsciente de esperanza, un clavo ardiendo al que asirse, en definitiva una idea ilusa y maravillosa de que lo que oyeron fuera una pesadilla, un mal sueño que podía desvanecerse.)
Confirmado lo peor, la búsqueda que ya había comenzado hacia tiempo continuó
su curso a duras penas y con la adrenalina a flor de piel.

Tener en cuenta que los miembros de la expedición no tenían medios materiales de ayuda para una situación de esta envergadura, ni herramientas, apenas comida y ningún material sanitario de primeros auxilios (camillas, sangre, vendas, torniquetes etc..............................................ósea........................................................................................ ¡ NADA ¡).
No olvidéis que precisamente la mínima ayuda de supervivencia les era suministrada regularmente por el avión, básicamente agua, víveres, pastillas potabilizadoras , lo imprescindible, todo lo demás era superfluo.

Partieron realmente a ciegas a la búsqueda de un avión de caza minúsculo que podría haber caído en un radio de varios kilómetros a la redonda, en una dirección solamente aproximada y en medio de un tupido bosque.
Para los que conozcáis el bosque del Pico o Moka por ejemplo, imaginaros la situación.
No percibían indicios de incendio y el avión podía estar total o parcialmente oculto por el bosque, con toda seguridad.

Os puedo decir que tardaron varias horas en localizar el aparato y a todo esto, en ese tiempo estuvieron en contacto permanente por radio con Sta. Isabel.

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(Mi padre además del estado de animo que os podéis imaginar, días antes había hablado con su hermano Manolo Padilla y suponía tal y como habían acordado, que era el acompañante de Rosique en ese vuelo.
Os diré que mi tío Manolo que entonces estaba soltero, no era precisamente un ejemplo de puntualidad y llegó al aeropuerto viejo a subirse en el T-6, cuando este estaba rodando por la pista, pero mi padre no sabia eso en esos momentos.)
........................................................................................................................................................................


Cuando después de varias horas localizaron el T-6, mi padre, Ramón Izquierdo y Sauras, ya estaban exhaustos por el esfuerzo físico y por la adrenalina segregada, imaginaros la experiencia y la angustia durante la caminata a ciegas.
Creo que llevaban consigo a no más de dos acompañantes nigerianos y por toda herramienta, algunos machetes y una o dos hachas pequeñas de mano,............... ¡ no había más !.

El espectáculo que encontraron, les dejó la sangre y el alma helados.

El Caza estaba literalmente con todo el morro empotrado en el suelo y en la maraña de maleza, la totalidad del motor estaba prácticamente oculto, quizá por eso no se incendió o tal vez iba justo de combustible.
Los tripulantes, como en lo más profundo de su alma presentían sin exteriorizarlo, estaban muertos.

.......................................................................................................................................................................
Mucho después cuando mi padre lo contaba, no podía comprender como con unos machetes y un hacha pequeña, pudieron romper el fuselaje y la carlinga del avión hasta hacer un boquete lo suficientemente grande como para sacar los cuerpos, no recuerdan como fue posible pero lo hicieron.
Al cabo del tiempo, cuando se pudo subir a la cima del pico con vehículos, hubo una comisión de investigación militar que subió a reconocer el T-6 para tratar de esclarecer las causas del accidente y le comentaron a mi padre que el T-6 era un avión de guerra, pequeño, potente, pesado y muy sólido, que no se explicaban como con esos medios pudieron abrir un hueco en el fuselaje como para sacar dos personas.
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Mi padre comunicó a Sta. Isabel la situación, informando de todos los detalles y solicitando lo más rápidamente posible una expedición de socorro.
Todo lo más que pudieron hacer a la espera de ayuda, fue proteger los cadáveres con los paracaídas de color naranja que formaban parte del equipo del avión, supongo que llorar y supongo que tal vez y cada cual su aire, rezar.

Acerca de esos momentos que imagino terribles y en los que cada instante se siente como horas, no puedo daros muchos detalles porque mi padre cada vez que lo ha recordado o he presenciado como se lo relataba a alguien se ha cuidado siempre muy mucho de huir de darlos, en parte porque era la personificación de la discreción y en parte porque algo en su garganta le traicionaba aunque se esforzase en disimularlo.

Se organizaron dos expediciones de ayuda, una primera, tengo la seguridad de que por la urgencia, angustia, precipitación, los nervios y la improvisación, fue un fracaso.
Salieron sin equipo adecuado, algunos iban con sandalias, llegando lógicamente con los pies ensangrentados, comidos por los mosquitos, hechos polvo y sin medios de ayuda, ni para ellos mismos ni para los demás, de forma que cuando llegaron arriba, tuvieron que ser literalmente auxiliados de urgencia por los que esperaban su auxilio.

Con muy poca diferencia de horas, salió otra expedición de socorro, esta vez si, bien preparada y equipada, baste decir que la organizó Jiménez Marhuenda, hombre experimentado y que la organizó perfectamente, tuvo que encargarse de prever la ayuda para los que estaban allí y para los que con buena intención pero poca experiencia, habían subido precipitadamente.

Mi padre llegó un momento en el que se quedó prácticamente afónico de tanto hablar por radio y subir el tono de voz para paliar la agonía de las baterías.
Los demás detalles creo que no tiene mayor importancia y en cualquier caso yo no los conozco, solo deciros que mi padre llegó en un estado tal a Sta. Isabel, tras descender con la comitiva que bajó los cuerpos, que por primera vez en su vida en todos los años de su estancia en Guinea que fueron muchos, tuvo que guardar cama varios días en un estado deplorable, básicamente anímico
Más tarde y durante muchos meses (yo llegué a Sta. Isabel ese mes de Junio y lo viví), dormía mal y se despertaba con pesadillas, sudores y temblores (y no, no tenía que ver nada con el paludismo, desgraciadamente).
Hablo en ese sentido del estado de mi padre porque lo conozco de primera mano pero estoy seguro y tengo referencias al respecto, de que lo mismo les ocurrió a Ramón Izquierdo y a Alfredo Sauras.

Y eso es todo lo que mi memoria puede relataros de este lamentable suceso que nunca debió ocurrir y que hace reflexionar sobre lo intrincado de los laberintos y las sin razones aparentes del destino y los seres humanos.

Esta es la peor parte, la parte sombría e inevitable de una aventura que como otras tantas quizá anónimas, pone de manifiesto el coraje y el amor a Guinea de todos los que vivimos en ella a lo largo de varias generaciones y sobre todo la generación de nuestros mayores que dejaron en ella su esfuerzo, tesón y en definitiva su vida entera, con cariño y sin esperar nada más que la recompensa de construir una Guinea aún mejor que la que encontraron a llegar, simplemente porque Guinea “se lo merecía” y era justo darle lo mejor de ellos mismos, a cambio de todo lo que Guinea les dio a ellos y a nosotros.

Sea este mi grano de arena en homenaje a “esa generación” de nuestros padres sin la cual, la Guinea que nosotros conocimos, no hubiera sido la misma.


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POSDATA
Reflexiones:
Cada vez que he pensado en Rosique estos años y ya son muchos, siempre he tratado de imaginar su vida en Guinea.
Con un avión reluciente, potente, hermoso y veloz, sobrevolando los cielos del país que todos amamos pero que pocos como él pudieron contemplar desde sus cielos, admirar y tener una visión de él, absolutamente diferente del resto de nosotros.
Nosotros hemos disfrutado de sus bosques, sus mares, sus ciudades y sus ríos pero él además disfrutó de sus aires, sus vientos y sus nubes.
Libre como un pájaro sobrevolando Sta, Isabel, el mar, los bosques, la gran caldera y el pico a su total libertad y voluntad, solo me atrevo a vislumbrar tímidamente lo que sentiría, porque es algo inimaginable para mi y solo él podría contárnoslo.
A pesar de eso, me he atrevido muchas veces a tratar de imaginármelo con los ojos cerrados y tuvo que ser increíble.

También he reflexionado sobre su accidente y siempre llego a la misma conclusión.

Hacía a la perfección su trabajo, disfrutaba estoy seguro de ello y servía a su país profesional y emocionalmente, además de a sus amigos.
Utilizo conscientemente la palabra “servía”, en el sentido más ético de la misma es decir, siendo militar de profesión se adelantó a su tiempo utilizando su profesión como servicio a la sociedad sin necesidad de matar enemigos, si en cambio “construyendo” como profesional y como hombre, en el aspecto más positivo del concepto “servicio”.

Sean estas palabras mi homenaje a un hombre al que sin conocer nunca personalmente, le he llevado en mi cabeza todos estos años con un gran sentimiento de gratitud por lo que hizo por todos los miembros de la expedición, por nuestra Guinea y por mi padre especialmente y en particular.

Mis respetos a su familia y .....................................................................................gracias.
Mis respetos a la familia del cabo Reina y..............................................................gracias.

:ph34r: :ph34r: :ph34r:

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Oct 23 2004, 01:20 PM

CRONICAS DE LA ASCENSION AL PICO
4ª Luces y sombras

Creo que viene al caso insertar algunas imagenes que vienen como anillo al dedo en contra de mi costumbre después de la recomendación de nuestro amigo Raimon, pero me parecen justificadas y si no fuera posible dejo a Raimon el derecho de eliminarlas o moverlas.
Gracias.
1 Con motivo del 25 aniversario de Radio santa Isabel (1943-1968), se decide por suscripción popular, colocar en la cima del pico, en el lugar exacto del accidente una imagen de la virgen.
2 Imagen de la virgen "Bisila".
3 Comentario de su colocación.
4 Mi padre y Ramón Izquierdo en la cima del Pico con la tablilla grabada con los nombres de los participantes en la expedición.
5 Mi padre con Alfredo Sauras en el mismo escenario.

 

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Oct 23 2004, 01:21 PM

CRONICAS DE LA ASCENSION AL PICO
4ª Luces y sombras

 

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Oct 23 2004, 01:23 PM

CRONICAS DE LA ASCENSION AL PICO
4ª Luces y sombras

 

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Oct 23 2004, 01:28 PM

CRONICAS DE LA ASCENSION AL PICO
4ª Luces y sombras

Imagen de Alfredo Sauras y mi padre en la cima del pico.
La de Ramón Izquierdo, la podeis ver en la 2ª crónica, no recordaba que ya estaba insertada y así ahorramos espacio.
:ph34r:

 

Publicado por: José Mª Balboa el Oct 23 2004, 01:55 PM

José Eduardo:
Gracias por tus crónicas de la ascención al Pico de Santa Isabel. Tus comentários han sido muy amenos e interesantes y me han hecho pasar ratos muy agradables.
Solo quiero decirte, que si algun dia, Dios lo quiera, te ves en la aventura de rememorar la ascención historica realizada por tu padre,que todo es posible, quiero que cuentes conmigo para acompañarte como Sherpa o bracero; tu veras que trabajo me encomiendas.. wink.gif
Para mí siempre sería un placer participar contigo.

Un abrazo.

Publicado por: mariasun chillida el Oct 26 2004, 11:35 AM

Querido, como siempre que leo tus crónicas, me quedo durante varias minutos sin palabras y con la mente totalmente en blanco, solo una sensación de opresión en la garganta y el estómago y después la enorme alegria de tener un cronista como tu, que nos cuenta con todo lujo de detalles, acontecimientos de un tiempo que compartimos .
Gracias de nuevo por esta detallada "HISTORIA" DE NUESTRA TIERRA.

Besos, te quiero :ph34r: :ph34r:

Publicado por: Maritere Luque el Oct 28 2004, 12:17 PM

Jose Eduardo Padilla.... muchisimas gracias por tus cronicas, yo tambien recuerdo un poco de lo de la subida al pico. Viendo las fotos de tu padre e Izquierdo, me viene mas a la memoria. Tambien recuerdo el tragico accidente del avion. Una cosa que no se me olvido jamas fueron los comentarios que oi hacer a los 'mayores' de como tu padre y los demas que estaban alli arriba lucharon con la naturaleza para llegar hasta el avion. Aunque ya lo tenia antes, tu padre y sus companeros se ganaron absolutamente la admiracion de la poblacion de Guinea.

Gracias otra vez y continua con tus memorias que las cuentas tan bien.

Un abrazo

Maritere

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Nov 5 2004, 02:07 PM

Vuestro reconocimiento, me hace sentirme entre amigos como no podia ser menos.
Muchas gracias por vuestros comentarios.

Dicho esto trataré de insertar un dibujo de la tablilla que se colocó en la cima del Pico el 5 de Marzo de 1966, cuando se coronó.
La he sacado de la foto original y los nombres pueden tener algun error gramatical, pero a groso modo y con ayuda de una lupa, creo que el resultado puede valer.

El motivo es que en ella aparecen los nombres de todos los participantes incluyendo los más humildes, creo que es justo por mi parte recordarlos también, porque sin ellos la expedición no habria llegado a buén puerto y su comportamiento como ya os conté, fué excepcional.

 

Publicado por: Foxtrot el Nov 5 2004, 11:55 PM

UN GRUPO DE PERSONAS EXCEPCIONALES ( EN UN MOMENTO, ALGUNOS, HEROES), DE LOS QUE HAY QUE HABLAR MUCHO MÁS.

CREO QUE YA SE HA COMENTADO.

GUARDO TODAS LAS CRONICAS. MERECEN UN LIBRO.

UN RECUERDO IMBORRABLE Y UN FUERTE ABRAZO DE Fernando.

Publicado por: okangon el Nov 8 2004, 02:17 PM

Gracias Jose Eduardo, se vive lo narrado por tí.

Una estupenda crónica que es historia.

Un abrazo.

Antº

Publicado por: rosen el Sep 12 2010, 12:02 PM

CITA(Jose Eduardo Padilla @ Oct 7 2004, 09:28 PM) *
Pues creeme que casi me olvidé de esa anécdota, pero en el último momento la recordé gracias a que el dia antes de editar la crónica, comí en casa de mi madre y me lo recordó.
Un abrazo.

(COSAS DE LA INFORMATICA-COMENTARIO POR DUPLICADO-COMO LAS POLIZAS DE LA ADMINISTRACION)
M´BOLO.

______________________________________________________

CUCÚ !! ... tongue.gif

A ver Josedu ... cuando lanzas un post y no te gusta como te ha quedado o quieres modificarlo ..... EDITAS -----> corriges --> RELANZAS (modificar comentario). SÓLO PARA MIEMBR@S REGISTRAD@S smile.gif


DND biggrin.gif biggrin.gif biggrin.gif

PD/ Conste que esto de entrar a un post "ajeno" lo hago porque el josedu es como mi hermano y no se va a molestar y tb porqué he pensado que si se lo digo justo donde le ha pasado, le resultará más fácil entender lo que le cuento ....... y como no ... valga ya para todo el mundo. No obstante .... alguien me "regañará" .. que lo sé yo .... unsure.gif

KSS


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Publicado por: Invitado RASHOMON el Sep 12 2010, 09:25 PM

CITA(Jose Eduardo Padilla @ Oct 23 2004, 12:59 PM) *
23 de Octubre de 2.004

CRÓNICAS DE LA ASCENSIÓN AL PICO
4ª Luces y sombras

Dejo para esta última parte, el relato de los hechos concernientes al fatal accidente de Rosique y el cabo Reina porque creo que por méritos propios se lo merece.

El accidente, no recuerdo la fecha exacta en que ocurrió.
Debió de ser con anterioridad a ese día 6 de Marzo de 1966, de culminación de la cima del Pico que os comentaba en crónicas anteriores, nadie de mi entorno recuerda la fecha exacta y como esto es un foro abierto, si alguien conoce el dato o cualquier otro, podría aportarlo para completar nuestros archivos colectivos de memoria.
En cualquier caso, parece que Febrero de ese año es a groso modo la fecha correcta.

En general he procurado no mencionar ningún dato o hecho del que no esté absolutamente seguro, por lo tanto insisto, tiremos de nuestra memoria y enriqueceremos nuestros recuerdos comunes, porque son excepcionales.

Como anécdota previa os diré que mi padre tenía un oído excepcional, nos contaba que en muchas ocasiones en las que el día estaba despejado, él “oía” perfectamente despegar al T-6 “desde el aeropuerto viejo de Sta. Isabel”, estando la expedición ya en la cima del Pico y de esa forma sabia con bastante aproximación el tiempo que tardaría en aparecer su esperada y familiar silueta recortándose en el cielo, era su contacto con la civilización, una bocanada de aire fresco y un recordatorio de que “no estaban solos”, nada más y nada menos.

Ese triste día el T-6 acababa de evolucionar y llevaba ya algún tiempo en contacto visual con el personal de la expedición, no se si ya habría soltado su envío o no, pero todo transcurría con normalidad.
Después de dar unas pasadas rutinarias, desapareció como en otras ocasiones, virando en circulo tras la falda del Pico como maniobra habitual para volver a aparecer por la ladera opuesta o para definitivamente regresar.

Lo que mi padre nos contó es que él percibió muy claramente dos cosas a los pocos instantes de desaparecer el caza de su campo de visión:

La primera una parada “súbita y repentina” del ruido del motor.

Inmediatamente después un ruido sordo inequívocamente de un impacto.

Imaginaros que en unas fracciones de segundo la situación pasó de ser agradable, rutinaria y normal, al desconcierto, el caos, la angustia y la incredulidad.

Inmediatamente de suceder esto, comenzó una actividad frenética porque todos se temían lo peor, pero por otra parte no acababan de darle crédito a la situación y reaccionar, la angustia y la incertidumbre se apoderó de la situación durante breves momentos que se les hicieron interminables.

Tener en cuenta que en el silencio del Pico, se oye con mucha claridad cualquier ruido o sonido, pero las distancias que la mente asocia son engañosas y el ruido puede proceder de mucho más lejos de lo estimado en un principio, con lo cual la incertidumbre de a donde dirigirse, se sumaba al estado general de ánimo y al desconcierto.

No tenían apenas ninguna duda “racional” de que el avión había sufrido un accidente pero no tenían idea de la gravedad del mismo ni de la dirección exacta a la que dirigirse en su busca, ya que el impacto se oyó fuera del campo de visión y a una distancia indeterminada, se pusieron en marcha de inmediato las pocas personas que en ese momento estaban allí y en la dirección aproximada que llevaba el avión en los últimos segundos que pudieron verle, ese era el único dato de la trayectoria que tenían.

La angustia era insoportable porque el tiempo estaba en su contra y la mente en momentos así no razona con claridad, suponían lo peor pero eran conscientes de que en caso de admitir una intima esperanza de encontrarlos con vida, la habilidad y la suerte de no errar en la elección del itinerario a seguir era vital para ganar la partida al tiempo, podía ser la diferencia entre la vida o la muerte de los accidentados.
Se envió un emisario al campamento base más cercano para que subieran todas las personas posibles a ayudar.

Mi padre mientras se ponían en marcha y durante todo el camino, contactó con Sta. Isabel por radio y les informó de lo ocurrido y del inicio de la búsqueda, pidiendo también que se organizara una expedición urgente de rescate.

El aeropuerto confirmó que el caza no había regresado (siempre quedaba un resquicio inconsciente de esperanza, un clavo ardiendo al que asirse, en definitiva una idea ilusa y maravillosa de que lo que oyeron fuera una pesadilla, un mal sueño que podía desvanecerse.)
Confirmado lo peor, la búsqueda que ya había comenzado hacia tiempo continuó
su curso a duras penas y con la adrenalina a flor de piel.

Tener en cuenta que los miembros de la expedición no tenían medios materiales de ayuda para una situación de esta envergadura, ni herramientas, apenas comida y ningún material sanitario de primeros auxilios (camillas, sangre, vendas, torniquetes etc..............................................ósea...........................
............................................................. ¡ NADA ¡).
No olvidéis que precisamente la mínima ayuda de supervivencia les era suministrada regularmente por el avión, básicamente agua, víveres, pastillas potabilizadoras , lo imprescindible, todo lo demás era superfluo.

Partieron realmente a ciegas a la búsqueda de un avión de caza minúsculo que podría haber caído en un radio de varios kilómetros a la redonda, en una dirección solamente aproximada y en medio de un tupido bosque.
Para los que conozcáis el bosque del Pico o Moka por ejemplo, imaginaros la situación.
No percibían indicios de incendio y el avión podía estar total o parcialmente oculto por el bosque, con toda seguridad.

Os puedo decir que tardaron varias horas en localizar el aparato y a todo esto, en ese tiempo estuvieron en contacto permanente por radio con Sta. Isabel.

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(Mi padre además del estado de animo que os podéis imaginar, días antes había hablado con su hermano Manolo Padilla y suponía tal y como habían acordado, que era el acompañante de Rosique en ese vuelo.
Os diré que mi tío Manolo que entonces estaba soltero, no era precisamente un ejemplo de puntualidad y llegó al aeropuerto viejo a subirse en el T-6, cuando este estaba rodando por la pista, pero mi padre no sabia eso en esos momentos.)
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Cuando después de varias horas localizaron el T-6, mi padre, Ramón Izquierdo y Sauras, ya estaban exhaustos por el esfuerzo físico y por la adrenalina segregada, imaginaros la experiencia y la angustia durante la caminata a ciegas.
Creo que llevaban consigo a no más de dos acompañantes nigerianos y por toda herramienta, algunos machetes y una o dos hachas pequeñas de mano,............... ¡ no había más !.

El espectáculo que encontraron, les dejó la sangre y el alma helados.

El Caza estaba literalmente con todo el morro empotrado en el suelo y en la maraña de maleza, la totalidad del motor estaba prácticamente oculto, quizá por eso no se incendió o tal vez iba justo de combustible.
Los tripulantes, como en lo más profundo de su alma presentían sin exteriorizarlo, estaban muertos.

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Mucho después cuando mi padre lo contaba, no podía comprender como con unos machetes y un hacha pequeña, pudieron romper el fuselaje y la carlinga del avión hasta hacer un boquete lo suficientemente grande como para sacar los cuerpos, no recuerdan como fue posible pero lo hicieron.
Al cabo del tiempo, cuando se pudo subir a la cima del pico con vehículos, hubo una comisión de investigación militar que subió a reconocer el T-6 para tratar de esclarecer las causas del accidente y le comentaron a mi padre que el T-6 era un avión de guerra, pequeño, potente, pesado y muy sólido, que no se explicaban como con esos medios pudieron abrir un hueco en el fuselaje como para sacar dos personas.
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Mi padre comunicó a Sta. Isabel la situación, informando de todos los detalles y solicitando lo más rápidamente posible una expedición de socorro.
Todo lo más que pudieron hacer a la espera de ayuda, fue proteger los cadáveres con los paracaídas de color naranja que formaban parte del equipo del avión, supongo que llorar y supongo que tal vez y cada cual su aire, rezar.

Acerca de esos momentos que imagino terribles y en los que cada instante se siente como horas, no puedo daros muchos detalles porque mi padre cada vez que lo ha recordado o he presenciado como se lo relataba a alguien se ha cuidado siempre muy mucho de huir de darlos, en parte porque era la personificación de la discreción y en parte porque algo en su garganta le traicionaba aunque se esforzase en disimularlo.

Se organizaron dos expediciones de ayuda, una primera, tengo la seguridad de que por la urgencia, angustia, precipitación, los nervios y la improvisación, fue un fracaso.
Salieron sin equipo adecuado, algunos iban con sandalias, llegando lógicamente con los pies ensangrentados, comidos por los mosquitos, hechos polvo y sin medios de ayuda, ni para ellos mismos ni para los demás, de forma que cuando llegaron arriba, tuvieron que ser literalmente auxiliados de urgencia por los que esperaban su auxilio.

Con muy poca diferencia de horas, salió otra expedición de socorro, esta vez si, bien preparada y equipada, baste decir que la organizó Jiménez Marhuenda, hombre experimentado y que la organizó perfectamente, tuvo que encargarse de prever la ayuda para los que estaban allí y para los que con buena intención pero poca experiencia, habían subido precipitadamente.

Mi padre llegó un momento en el que se quedó prácticamente afónico de tanto hablar por radio y subir el tono de voz para paliar la agonía de las baterías.
Los demás detalles creo que no tiene mayor importancia y en cualquier caso yo no los conozco, solo deciros que mi padre llegó en un estado tal a Sta. Isabel, tras descender con la comitiva que bajó los cuerpos, que por primera vez en su vida en todos los años de su estancia en Guinea que fueron muchos, tuvo que guardar cama varios días en un estado deplorable, básicamente anímico
Más tarde y durante muchos meses (yo llegué a Sta. Isabel ese mes de Junio y lo viví), dormía mal y se despertaba con pesadillas, sudores y temblores (y no, no tenía que ver nada con el paludismo, desgraciadamente).
Hablo en ese sentido del estado de mi padre porque lo conozco de primera mano pero estoy seguro y tengo referencias al respecto, de que lo mismo les ocurrió a Ramón Izquierdo y a Alfredo Sauras.

Y eso es todo lo que mi memoria puede relataros de este lamentable suceso que nunca debió ocurrir y que hace reflexionar sobre lo intrincado de los laberintos y las sin razones aparentes del destino y los seres humanos.

Esta es la peor parte, la parte sombría e inevitable de una aventura que como otras tantas quizá anónimas, pone de manifiesto el coraje y el amor a Guinea de todos los que vivimos en ella a lo largo de varias generaciones y sobre todo la generación de nuestros mayores que dejaron en ella su esfuerzo, tesón y en definitiva su vida entera, con cariño y sin esperar nada más que la recompensa de construir una Guinea aún mejor que la que encontraron a llegar, simplemente porque Guinea “se lo merecía” y era justo darle lo mejor de ellos mismos, a cambio de todo lo que Guinea les dio a ellos y a nosotros.

Sea este mi grano de arena en homenaje a “esa generación” de nuestros padres sin la cual, la Guinea que nosotros conocimos, no hubiera sido la misma.


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POSDATA
Reflexiones:
Cada vez que he pensado en Rosique estos años y ya son muchos, siempre he tratado de imaginar su vida en Guinea.
Con un avión reluciente, potente, hermoso y veloz, sobrevolando los cielos del país que todos amamos pero que pocos como él pudieron contemplar desde sus cielos, admirar y tener una visión de él, absolutamente diferente del resto de nosotros.
Nosotros hemos disfrutado de sus bosques, sus mares, sus ciudades y sus ríos pero él además disfrutó de sus aires, sus vientos y sus nubes.
Libre como un pájaro sobrevolando Sta, Isabel, el mar, los bosques, la gran caldera y el pico a su total libertad y voluntad, solo me atrevo a vislumbrar tímidamente lo que sentiría, porque es algo inimaginable para mi y solo él podría contárnoslo.
A pesar de eso, me he atrevido muchas veces a tratar de imaginármelo con los ojos cerrados y tuvo que ser increíble.

También he reflexionado sobre su accidente y siempre llego a la misma conclusión.

Hacía a la perfección su trabajo, disfrutaba estoy seguro de ello y servía a su país profesional y emocionalmente, además de a sus amigos.
Utilizo conscientemente la palabra “servía”, en el sentido más ético de la misma es decir, siendo militar de profesión se adelantó a su tiempo utilizando su profesión como servicio a la sociedad sin necesidad de matar enemigos, si en cambio “construyendo” como profesional y como hombre, en el aspecto más positivo del concepto “servicio”.

Sean estas palabras mi homenaje a un hombre al que sin conocer nunca personalmente, le he llevado en mi cabeza todos estos años con un gran sentimiento de gratitud por lo que hizo por todos los miembros de la expedición, por nuestra Guinea y por mi padre especialmente y en particular.

Mis respetos a su familia y ................................................................................
.....gracias.
Mis respetos a la familia del cabo Reina y..............................................................gracias.

:ph34r: :ph34r: :ph34r:


AMIGO PADILLA:

Agradezco tu invitación a leer esto.

Puedo asegurarte que el accidente en el que murieron el Capitan Miguel Delgado Rosique y el Cabo José Reina Cabello, ocurrió el día 12 de Abril de 1966. Yo estaba en Santa Isabel y estuve en su velatorio. No pude ir a ningana expedición de rescate porque no me escogieron...

No sé tantos detalles de la organización de las expediciones como tú, aunque algunas cosas las recuerdo diferentes, pero en general estoy de acuerdo cpontigo y dado el tiempo transcurrido sé que la memoria juega malas pasadas, por lo menos a mí, y es mejor no polemizar. Yo seguiré contando las cosas como las recuerdo tal como prometí en alguna parte de este FORO y me agradaría que me corrigieran si me equivoco.
Yo subí unos quince días después del accidente desde Basilé hasta el pico por la carretera nueva con varios amigos, y ví el avión empotrado en el suelo, no ardió efectivamente, pero se apreciaba al acercarse al aparato que desde el accidente, hasta que yo subí, había subido más gente y se habían llevado muchos recuerdos, aparatos de medida, manómetros, etc.
Te invito a mi vez a que sigas leyendo mi historieta sobre este accidente porque voy a añadir algunas cosas que voy recordando.

GRACIAS UNA VEZ MÁS, EN MI TIENES UN AMIGO.

Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Sep 18 2010, 07:30 PM

AMIGO PADILLA:

Agradezco tu invitación a leer esto.

CITA
Puedo asegurarte que el accidente en el que murieron el Capitan Miguel Delgado Rosique y el Cabo José Reina Cabello, ocurrió el día 12 de Abril de 1966. Yo estaba en Santa Isabel y estuve en su velatorio. No pude ir a ningana expedición de rescate porque no me escogieron...

No sé tantos detalles de la organización de las expediciones como tú, aunque algunas cosas las recuerdo diferentes, pero en general estoy de acuerdo cpontigo y dado el tiempo transcurrido sé que la memoria juega malas pasadas, por lo menos a mí, y es mejor no polemizar. Yo seguiré contando las cosas como las recuerdo tal como prometí en alguna parte de este FORO y me agradaría que me corrigieran si me equivoco.
Yo subí unos quince días después del accidente desde Basilé hasta el pico por la carretera nueva con varios amigos, y ví el avión empotrado en el suelo, no ardió efectivamente, pero se apreciaba al acercarse al aparato que desde el accidente, hasta que yo subí, había subido más gente y se habían llevado muchos recuerdos, aparatos de medida, manómetros, etc.
Te invito a mi vez a que sigas leyendo mi historieta sobre este accidente porque voy a añadir algunas cosas que voy recordando.

GRACIAS UNA VEZ MÁS, EN MI TIENES UN AMIGO.


Estimado Rashomon.
Cuando escribí estas crónicas, como mencionaba, desconocía la fecha exacta del accidente.
Interpreté que, puesto que la cima se coronó el 6 de marzo, debió ser antes. Pero fue un error de apreciación porque, una cosa es que la cima se coronara en esa fecha, y otra, que los trabajos terminasen. Muy al contrario, se prolongaron bastante y por tanto, Rosique siguió prestando su ayuda.
Por tanto tu fecha, seguro que es correcta.

Gracias a ti y no dudes de que en mi, también tienes un amigo.
Abrazos

Publicado por: fernando el africano el Sep 20 2010, 07:25 PM

Estimado José Eduardo :

Vista la discrepancia de fechas en el accidente con el avión T-6 ocurrido en el Pico de Santa Isabel, que le costó la vida a Miguel Delgado Rosique y al cabo Reina Cabello en acto de servicio, me he permitido leer la Revista La Guinea Española, de cuiya lectura podemos disfrutar en esta web, y en el mes de abril en noticias guineenses. da una escueta nota del accidente, dandop como fecha el ONCE DE ABRIL DE MIL NUEVECIENTOS SESENTA Y SEIS.


Publicado por: Jose Eduardo Padilla el Oct 11 2010, 07:48 PM

Efectivamente:

http://www.bioko.net/guineaespanola/1966/196605_01.pdf

Y teníamos la información, "en casa"

Publicado por: Moncho Núñez el Nov 2 2010, 08:24 PM

Otra información sobre las ascensiones al Pico es la que se encuentra en La Guinea Española del 2 de junio de 1940 referente a la primera mujer que participo en una subida.
Fue Dña. María Esther Uría de Soraluce, que acompañaba a su marido D. José Luis Soraluce, Comandante de Estado Mayor y Ayudante Militar del Gobernador, que además era Ingeniero Geógrafo. El matrimonio llevaba a su perrito lulu llamado "Cuqui".
Les acompañaba el Ingeniero Agrónomo, Jefe del Servicio Agronómico, D. Jaime Nosti.
Hicieron cumbre el día 20 de mayo
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